La novela más ferozmente divertida de Eduardo Mendoza. Las andanzas de un detective romano en el Nazaret del siglo I. En el siglo I de nuestra era, Pomponio Flato viaja por los confines del Imperio romano en busca de unas aguas de efectos portentosos. El azar y la precariedad de su fortuna lo llevan a Nazaret, donde va a ser ejecutado el carpintero del pueblo, convicto del brutal asesinato de un rico ciudadano. Muy a su pesar, Pomponio se ve inmerso en la solución del crimen, contratado por el más extraordinario de los clientes: el hijo del carpintero, un niño candoroso y singular, convencido de la inocencia de su padre, hombre en apariencia pacífico y taciturno, que oculta, sin embargo, un gran secreto. Cruce de novela histórica, novela policíaca, hagiografía y parodia de todas ellas, aquí se ajustan las cuentas a muchas novelas de consumo, y se construye una nueva modalidad del género más característico de Eduardo Mendoza: la trama detectivesca original e irónica, que desemboca en una sátira literaria y en una desternillante creación novelesca.
Me ha divertido ,me ha hecho sonreir me lo he pasado muy bien .De todos modos el mejor para mi es; la ciudad de los prodigios ,sin duda (Teniendo siempre en cuenta al increible y divertidisimo Gurp)
hace 17 añoscoincido con JADE, Mendoza escribe extraordinariamente bien. Un libro ameno que se lee en poco tiempo y del que conservas un grato recuerdo, lástima que la segunda mitad no esté a la altura de la primera.
hace 17 añosExcelentemente escrito. Meritoria narrativa. Pero le falta ese algo que, en esos momentos libres, hace decidirme a tomar el libro para seguir con la historia. Un poco más de ritmo???. Para mi un "BUENO" = 3. Lo más divertido de Mendoza es: "El misterio de la cripta embrujada" y "El laberinto de las aceitunas". Pomponio Flato no está a esa altura.
hace 17 añosMuy divertido y fácil de leer
hace 17 añosEn tiempos de Augusto, Pomponio Flato viaja por tierras de judíos hasta que llega a Nazaret y se ve envuelto, como el protagonista de El misterio de la cripta embrujada, en la investigación de un asesinato. Atención a los personajes secundarios que el reparto no tiene desperdicio: ayudante, el niño Jesús; sospechoso, un carpintero padre putativo del ayudante; víctima, el rico Epulón; la Virgen, San Juan, Herodes, y hasta Barrabás desfilan por esta parodia repleta de páginas antológicas. Un Belén descrito con maestría en el que no falta ni el Caganer. Lo más divertido de Mendoza, a la altura de Sin notícias de Gurb.
hace 17 años
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