Andrew Lang, notable escritor escocés, erudito en tantas materias, presenta una curiosa afinidad con el célebre polígrafo hispano, el mejicano Alfonso Reyes, por su amor a la Grecia antigua, su saber enciclopédico y la calidad estilística de su escritura. Una de las mejores obras de Lang son estos preciosos cuentos sobre Troya y la Antigua Grecia. Sirviéndose de esos cinco grandes relatos fundacionales de las letras occidentales que son la "Ilíada", la "Odisea", las "Argonáuticas" y las historias de Teseo y Perseo, por el libro desfilan desde el Lecho de Procusto al Hilo de Ariadna, pasando por Escila y Caribdis. Y lo hacen sin que la posible traba de la versificación, o la narración arcaica, de las obras originales, se interponga en el puro placer narrativo del lector.