En 1910 William Hope Hodgson comenzó a publicar las historias de Thomas Carnacki en las páginas de The Idler Magazine. Esta cuidadísima edición de Valdemar reúne las nueve historias que el autor escribió sobre tan peculiar investigador: La cosa invisible, La puerta del monstruo, La casa entre los laureles, La habitación que silbaba, El investigador de la última casa, El caballo invisible, El encantamiento de Jarvee, El hallazgo y el el Cerdo. Todos los relatos comparten la misma estructura: comienzan con Thomas invitando a cenar, sin previo aviso, a sus amigos Jessop, Arkright, Taylor y Dodgson. Tras cenar en el más absoluto silencio y ya relajados y bien acomodados ante la chimenea, les relata su última aventura contra las fuerzas del más allá. Una vez finalizada la narración, los echa de casa de una manera un tanto abrupta. Thomas Carnacki, a diferencia de Dupin o Holmes, investiga sucesos paranormales a los que se enfrenta con un pentáculo mágico, una cámara fotográfica, grimorios y otras herramientas ficticias como el pentagrama eléctrico, el Manuscrito Sigsand o el Ritual de Saaamaaa. Aunque en algunos casos los extraños fenómenos a los que se enfrenta se deben a la mano del hombre, en otros, ha de enfrentarse a fuerzas oscuras que ponen a prueba su cordura y le hacen sufrir auténtico terror. Un pavor que Hodgson describe tan vívidamente que consigue que percibas el ambiente opresivo y sientas el miedo del protagonista ante los fenómenos paranormales. Especialmente en “El caballo invisible”, el relato que más me ha gustado.
hace 6 años