En el verano de 1987, vísperas del 25 aniversario de la muerte de Marilyn Monroe, Ignacio Carrión recorrió Estados Unidos de costa a costa en busca de las huellas del sex-symbol que enamoró a toda América y despertó los deseos del resto del mundo. Rastreó la pista de aquella criatura vulnerable desde su adolescencia miserable hasta su muerte, si cabe, aún más miserable. Entrevistó a su primer marido, Jim Dougherty, el único que la conoció virgen; al camarero del restaurante a donde la llevó a comer Tom Kelley después de fotografiarla desnuda para un calendario y al florista que durante décadas depositó en su tumba rosas rojas por encargo de Joe Di Maggio, el segundo marido de Marilyn. Este libro recopila por primera vez aquel largo y melancólico recorrido por una geografía, la del mito.