En una época de carencias y pobreza, el protagonista, un pintor bohemio que busca sentido a su existencia, se deja llevar por antiguos sentimientos amorosos y decide compartir su vida con una familia ajena dada a la extravagancia y a la frivolidad, junto a una niña que, en principio, sólo le acompañaba en un viaje de dos días y que, a la postre, acabará también convirtiéndose en un miembro más de esa extraña composición familiar. Nostalgia, amor, celos y amistad son los materiales con los que Carmen Laforet teje esta sublime novela en que su talento está al servicio de la creación de un mundo particular, hedonista y de variado cromatismo dentro del orbe gris de la posguerra española. Al volver la esquina, escrita en los años setenta, es mucho más que el mero descubrimiento de una obra inédita de una de las escritoras más insignes de la segunda mitad del siglo XX; es una notable aportación a la novela española y una novela de madurez narrativa que pone el broche de oro a la escasa y brillante obra de la autora de Nada y La insolación.