Beryl Tavistock creía que el mejor lugar para esclarecer el escándalo que rodeaba la muerte de sus padres eran las calles de París. Pero las respuestas que estaba obteniendo no hacían más que confirmar lo difícil que resultaba ocultar viejos secretos. A lo largo de aquella oscura investigación en pos de la verdad, Beryl se adentró en un mundo en el que el peligro se mezclaba a partes iguales con el deseo, un mundo en el que el ex agente de la CIA Richard Wolf parecía moverse con soltura. Pero en aquel mundo los amigos podían convertirse en enemigos y los enemigos podían ser asesinos…