Mientras la mayoría de los teóricos militares del período de entreguerras permanecían anclados en los principios de la defensa estática, cuya plasmación más destacada sería la tan costosa como inútil Línea Maginot, Guderian planteaba una apuesta decidida por la movilidad. Según él, los blindados lanzados a toda velocidad, con el apoyo de la aviación, podían conseguir la rotura del frente y desarbolar al enemigo; había nacido la Blitzkrieg, la guerra relámpago. Las teorías de Guderian, expuestas en esta mítica obra escrita en 1936 y ahora publicada por primera vez en español, serían puestas en práctica con devastadora eficacia por la Wehrmacht entre 1939 y 1941, alcanzando unos incontestables éxitos militares que sorprenderían al mundo.