Ha sido una lectura irregular y un poco decepcionante, con altibajos. Lo bueno es que no llega a aburrir. A quien le guste el tema siempre encuentra datos históricos interesantes y curiosos. En especial la 1ª mitad del libro con las descripciones de las tribus hispánicas con sus costumbres, su forma luchar y sus ritos religiosos. También es destacable la expedición hacia Roma con las penalidades que sufrió y las estrategias de las diferentes batallas que tuvo.
Está narrado mezclando diferentes estilos, mayoritariamente en forma de autobiografía, ensayo histórico con partes de novela y epistolar. La forma de contarlo, según mi opinión, es donde más flojea, no tiene un ritmo ligero y ágil, a pesar de que intercala algunos diálogos. Se hace un tanto espeso con contados fragmentos buenos sobre el contexto histórico, o los pensamientos y acciones de Aníbal. También se salvan las cartas escritas por un espía, siendo más amenas que el resto del texto; y los dos diálogos (aunque muy breves) entre Aníbal y Escipión “El Africano”, enemigos y admiradores a la vez.