Inicio prometedor, historia intrigante, planteamiento atractivo... y ya está. Por desgracia, a las pocas páginas el libro empieza a desinflarse hasta convertirse en una mala broma, con un final (¿el peor que he leido nunca?) tan infantil y poco elaborado que es casi un insulto al lector. Lástima.

Aaaay, Amélie, Amélie... Me encanta tu rollo Amélie, lo confieso, te tengo debilidad, y esta historia prometía, comenzaba bien pero ¿qué prisa te entró al final Amélie? Desde luego, no te fumaste lo mismo el día que empezaste esta absurda y surrealista historia, con esa premisa tan atractiva, ese inicio tenso, con ese flipao de Baptiste... que el día que decidiste romper con la historia y sacarte de la manga ese atropellado final. Igual te pusiste a beber champán con Olaf y Sigrid y se te fue... No sé. Aún así, se sigue notando tu mano en esos diálogos ágiles, esos acontecimientos delirantes, esos párrafos que me evocan imágenes imposibles (esa piscina y su mecanismo) y por eso me leí el libro de un tirón (por eso y porque tus libros son cortos, no nos vamos a engañar). Confieso que nos veremos en otra Srta. Nothomb.

No de los mejores de Nothomb pero bastante seductor. Continúas con la tensión del personaje de "cómo va a acabar este delirio". Elegante como el champagne del que se alimentan.

No merece el reconocimiento que merecen la mayoria de novelas de esta escritora, bastante mediocre.

Es el que menos me ha gustado de la autora con diferencia. A pesar de ser tan corto, se me ha hecho bastante largo, y no le he encontrado "sustancia" por decirlo de alguna manera.

No alcanza el nivel de otras obras. sigue teniendo los diálogos ágiles de Nothomb, pero el libro te deja frío.

Es un libro divertido, y rápido de leer, aunque queda como "sin final" pero está muy bien, es entretenido.

Me ha sorprendido un poco por el cambio de tema (estoy acostumbrada a sus temas sobre su vida en Japón) que toma la autora en este libro. No me ha parecido tan simpático como los otros que me he leído suyos pero sí sorprendente. El argumento puede parecer un tanto absurdo y/o surrealista (creo que es ambas cosas) pero los diálogos son inteligentes. precisamente creo que ese surrealismo y absurdez es lo que más me han enganchado y me he acordado en alguna ocasión de la película “El ángel exterminador” de Buñuel que en su ocasión creo que vi con la misma cara con la que leí este libro. Un libro “diferente” pero que no me ha dejado indiferente. Por cierto la escena de la piscina es de lo más original que he leído nunca.