Oslo, 1968. En la segunda planta de un edificio al este del río se oye un disparo. Los vecinos se agolpan inmediatamente en la entrada de la vivienda, pero nadie contesta. Cuando llega la policía para abrir la puerta, encuentran el cadáver de un antiguo héroe de la Resistencia noruega contra los nazis, víctima de un disparo. No hay nadie más en el interior del piso, ni arma homicida, ni existe la posibilidad de haber huido sin ser visto. El joven y arrogante inspector encargado del caso se encuentra ante un misterio en apariencia irresoluble. No sabe cómo avanzar hasta que se cruza en su camino una chica de dieciocho años, multimillonaria, que va en silla de ruedas y tiene una mente analítica prodigiosa.