Un policía nacional de Huesca, Moisés Guzmán, es contratado por un médico catalán afincado en Zaragoza para que investigue la desaparición, trece años atrás, de una niña, tras haber sido asesinados sus padres. El médico está convencido de que la niña vive y desea localizarla. Moises toma una excedencia de su trabajo y se traslada a Barcelona para investigar los hechos. Allí descubre que otros investigadores ya han intentado localizar a la niña. Tal como va avanzando su investigación va a ver peligrar su vida.