Aunque ha aparecido recientemente en España el relato corto "Huesos en el jardín"; "El hombre inquieto" pasa por ser la última novela policial del sagaz e intuitivo inspector Wallander. Mankell se despide así de su carismático personaje, poniendo punto final a determinados capítulos y episodios -prolongados a lo largo del tiempo- que no acababan por quedar resueltos. La investigación y el caso que le ocupan en este volumen, son para mí, totalmente baladíes e intrascendentes; ya que lo que más me interesa como lector es su funesta y precaria vida personal: Una espumeante ola de grisáceo mar que va encauzada hacia el retiro, la soledad, la vejez y las brumas incipientes del alzheimer. La narración adquiere desde el principio tonos melancólicos, tristes y plagados de nostalgia. Los pasos ya lentos de un hombre que lo ha dado todo por su profesión; pero que fuera de ella, se siente completamente perdido, desolado e incomprendido. El broche de oro que faltaba por poner a esta gran saga de diez libros de género negro, realmente cautivadores.
hace 8 años