Me gustan mucho estos libros que recogen las libretas de notas, apuntes, carnets... de los escritores, porque a través de estas rápidas improvisaciones puedes contrastar su forma de trabajar, sus manías, sus pensamientos (antes de pasar por el tamiz de los personajes), el "work in progres" de una determinada obra que absorbe su mente y las ideas-germen de algunos textos, aún sin madurar, o incluso los palos de ciego previos. Ahora bien; nada de esto me ha sucedido con este cuaderno de notas de Chéjov. Yo lo atribuyo a que la aparente simpleza de sus obras hace que las anotaciones sueltas sean intrascendentes. Por otra parte, en la edición no hay ninguna referencia a posibles obras a las que haya que atribuir la anotación en concreto, y esto habría ayudado mucho a la hora de valorarla.
hace 12 años