La batalla de Waterloo fue uno de esos hitos históricos -una línea divisoria, un punto de inflexión, un suceso de los que marcan una época, un láser direccional del pasado hacia el futuro- de los que depende nuestra comprensión del pasado. La nítida y concisa exposición de Andrew Roberts subraya el modo extraordinario en que los acontecimientos de un momento clave de la historia configuran para siempre lo que viene a continuación. "En este libro admirablemente conciso y vibrante, Roberts muestra cómo Napoleón rompió todas sus normas de combate y cómo le fallaron sus comandantes. Roberts mezcla en la proporción adecuada la anécdota y el detalle humano en su análisis de cómo se desarrolló esta extraordinaria batalla." Daily Express.