Voltaire, el filósofo e intelectual esencial del siglo de las luces, al enterarse de que otra vez está por ser detenido, se refugia en el castillo de la marquesa Émilie du Châtelet, matemática, física, traductora de Newton y una de las mujeres más brillantes de la época. Juntos, y rodeados de una biblioteca de más de veintiún mil volúmenes, pueden gozar de su pasión y del mutuo estímulo intelectual en soledad. Pese al amor intermitente que se profesaron, Émilie, siempre seductora, se labró una reputación marcada por otros afectos frecuentes y su adicción al juego, mientras que Voltaire, siempre encantador, se enamoró de su sobrina, madame Denis, aunque nunca dejó a la marquesa. Nancy Mitford narra sus agitadas vidas y disecciona con sutileza una aventura erótica entre dos inteligencias admirables, a la vez que esboza el retrato de una aristocracia escandalizada por el pensamiento libre: un cuadro fascinante de un siglo, «el de las pelucas» en el que, según Mauriac, el hombre se ha disfrazado menos.