Para mi gusto no es de las mejores novelas históricas que he leído. No tiene la emoción que transmite Posteguillo en sus obras ni siquiera el detallismo de otros autores. Falto de ritmo, se enreda demasiado en las deidades de las distintas tribus íberas para entremezclarlo con la vida del narrador Tongio y la del supuesto protagonista que es Viriato. Con todo no deja de ser curioso algunos pasajes aprovechables de las batallas de Viriato contra las tropas romanas. En mi opinión sabor agridulce el de este libro.
hace 8 años