Es muy difícil para Meg no tener envidia de su hermana; rubia, bonita y popular, Molly siempre sabe qué decir, y también sabe resultar agradable y simpática. Molly, que ya tiene su futuro resuelto, ha escogido sus metas sin mucha dificultad, mientras que Meg, decidida e insegura al mismo tiempo, y a veces se enfada sin motivo, y a veces se siente desgraciada y triste por todo. Lectura recomendada a partir de 12 años.