Con esta comedia, empezamos a publicar la obra teatral de Woody Allen. Seguirán a ésta Don’t drink the Water y The Floating Light Bulb. Play it again, Sam -frase célebre ya de Humphrey Bogart al pianista de su local, en «Casablanca»- se estrenó en el Broadhurst Theatre de Nueva York el 12 de febrero de 1969, con enorme éxito de público e inmejorable crítica : «Es la quintaesencia de Woody Allen y, por lo tanto, una delicia», (NBC-TV, programa «Today»), «Un esplendoroso éxito teatral» (Ed Sullivan), «Una comedia divertida, lo mejor que pueda hacerse en comedias divertidas» (United Press International), «Una sorprendente experiencia teatral» («WOR»), «Woody Allen exhibe aquí su estilo a la perfección» («The Record»), Play it again, Sam le asegura una noche plenamente satisfactoria» («Daily News»). Los que no tuvimos la suerte de ver la obra en Broadway, vimos, en cambio, en la pantalla Sueños de un seductor (título de la película en España), muy fiel adaptación, como puede apreciarse, de la obra de teatro. Cuesta olvidar al inefable personaje que encarnó tanto en el escenario como en el celuloide el mismo Woody Allen: un chico feo, neurótico y abandonado por su mujer, que sueña con aprender las técnicas de seducción de su ídolo, Humphrey Bogart, con quien, naturalmente, sostiene sabrosos diálogos acerca de cómo enfrentarse con las cosas de la vida y del sexo. Las ilustraciones que animan esta edición son fotos de la obra de teatro, y no de la película. Sin embargo, el lector no encontrará mucha diferencia, pues los protagonistas son los mismos en el teatro que en el cine y, en cambio, podrá ver a un Woody Allen jovencísimo y a una Diane Keaton con el pelo crepado, muy de los sesenta. Ya en el colegio de Brooklyn, Woody Allen escribió chistes para la revista de la escuela y, prácticamente sin darse cuenta, pasó a hacerlo también para humoristas de la radio y la televisión, hoy muy conocidos en los Estados Unidos. Tan sólo en 1986 empezó a interpretar él mismo sus textos, esencialmente autobiográficos, obteniendo grandes éxitos en las salas «Blue Angel», de Nueva York y «Crystal Palace», de St. Louis, y alternando estas actuaciones con shows televisivos. A partir del éxito cinematográfico de What’s new, Pussycat?, cuyo guión es suyo y donde aparece en un pequeño papel, se dedicó, con la aceptación que todos conocemos, a escribir, dirigir y actuar para el cine. Recibió el Oscar por la mejor película con Annie Hall, en 1978.