George Makari consiguió adentrarse como nadie lo había hecho antes en el alma de la teoría de la psique humana más influyente de los últimos tiempos: el psicoanálisis. El protagonista es el padre fundador, Sigmund Freud, quien recorre un camino digno de personaje trágico. Su trayecto abarca desde los tiempos como joven estudiante del fenómeno de la histeria en el París de finales del XIX hasta encumbrarse como máxima figura de la teoría del actuar humano más controvertida de la historia. Por Revolución en mente desfilan Josef Breuer, Eugen Bleuler, Carl G. Jung, Lou-Andreas Salomé, Georg Groddeck, Ernest Jones, Sabina Spielrein, Melanie Klein, Anna Freud y muchas más personalidades, que desempeñan por turnos papeles cruciales para la evolución y diversificación de los senderos del psicoanálisis. Makari revela que el psicoanálisis, lejos de ser una ciencia unificada y demostrable -como Freud procuró durante toda su vida-, se trata de una filosofia ecléctica y brillante, que cambiaría de manera definitiva la narrativa sobre las pulsiones que dominan al hombre.