Píndaro fue a la vez compositor del texto y de la melodía de los himnos. En muchas ocasiones, cuando la vecindad de los lugares en que debían cantarse sus poemas hacía fácilmente permisible su presencia, el poeta era también el director del coro, de la música y de la ejecución coreográfica. Este volumen incluye las Odas Olímpicas, Píticas, Nemeas e Ístmicas.