«Novalis —escribió el filósofo Georg Lukács— es el único poeta auténtico de la escuela romántica. Sólo en él se transformó el alma entera del Romanticismo en poema. La vida y la obra de Novalis —es inútil tratar de huir del lugar común— forman una unidad inescindible, y como tal unidad es un símbolo del Romanticismo en su plenitud». Una vida truncada en plena juventud y una obra compuesta en su mayor parte por fragmentos: sobre una y otra se alza uno de los episodios más deslumbrantes de la poesía universal. Si la palabra poética ya es de por sí visionaria y trascendente, lo es más en la pluma de Novalis, cuya agudeza filosófica tuvo a su servicio una expresión de la máxima sutileza y del más delicado lirismo.