Hoy toca la última reseña del mes del Orgullo, pero no por ello vamos a dejar de compartir estas historias. Ojalá el Orgullo fuese todo el año y no hiciesen falta este tipo de celebraciones para reivindicar las voces de la comunidad LGBTIQ+. Este libro habla un poco de eso, de lo necesario que es escuchar las voces de otres y que alcancen a les jóvenes que pueden estar ahora mismo descubriendo quienes son. Es difícil hablar de este libro sin desvelar lo que encontrareis entre sus páginas. Este libro es la vida de le autore, pero también es mucho más. Una muestra de lo mal que está el mundo, pero también del bien que puede hacer tener gente que te quiera y te apoye. Es un canto a la familia, a la de sangre y a la encontrada. Es una historia desgarradora que nos da lecciones de lo difícil que puede ser aceptarse a une mismo, pero también de la liberación cuando une logra dar ese paso. Por desgracia, siguen siendo necesarias que estas historias tengan más voz, porque la representación de la comunidad sigue siendo escasa y, en demasiadas ocasiones, cargada de estereotipos. La sociedad sigue necesitando libros como este, en el que les jóvenes puedan verse representades y comprenderse un poco mejor. Este tipo de libros dan alas, por muy duros que pueda ser leer algunos de los momentos que narran. Es un libro cargado de verdades, algunas bonitas y otras horribles, pero todas necesarias. Irbis.