La saga de Harry Potter está plagada de referencias universales que J.K. Rowling ha destilado de la historia, los mitos y las leyendas, así como de obras de autores clásicos de la literatura, para inspirarse y dar riqueza a su obra. Seres fabulosos como dragones, elfos, duendes, brujas, centauros, unicornios, Merlín o Circe. Leyendas como la de la piedra filosofal, el cancerbero o el ave Fénix. Sin olvidar objetos mágicos: varitas, escobas voladoras, bolas de cristal, cartas del tarot... De esta manera, la autora de la saga ha bebido de mundos reales e imaginarios, abarcando en su recorrido desde el antiguo Egipto, Grecia o Roma, pasando por la China o Japón, llegando hasta el templo de Salomón. Aprovechando que durante este año se celebra el 25º aniversario de la publicación del primer volumen de la saga, Mitología de Harry Potter analiza todos estos ingredientes universales que le aportan magia y credibilidad a una de las obras más exitosas de los últimos tiempos.