Una mujer que comparte la cama con un diablo de cartón, una libélula lujuriosa que anida en el pecho de una mujer, una adolescente que se agencia un amante son algunos de los personajes de los diablos de Teresa y otros relatos: historias que juegan entre lo real y lo fantástico, que narran desde la sorpresa del presenta y desde la ácida calidez de la nostalgia. Con este libro, Gabriela Fonseca confirma que la literatura fantástica tiene un sitio importante en la narrativa mexicana actual.