III Premio Logroño de Novela. En el invierno de 1876, en plena retirada del ejército carlista hacia los Pirineos, Simón y Andrés, combatientes del bando liberal, desertan y huyen en compañía de una niña a la que han rescatado del cruento saqueo de un caserío. Transcurrido un año de aquellos incidentes, Simón regresa en busca de Andrés para perfilar el extraño suceso que aconteció en pleno bosque en el transcurso de su huida. A su llegada al pueblo del compañero de armas, no obstante, descubre que éste asesinó a la que fuera su novia nada más regresar, y luego puso fin a su propia vida. Simón, incapaz de creer algo semejante, se propone averiguar qué ocurrió. A partir de ese momento, sus huellas se convertirán en un eco de las de Andrés, y su vida quedará ligada a la de los habitantes de Escarza de una manera que poco antes le hubiera parecido inconcebible, y que no permite augurar sino misterios más oscuros.