Ante el recelo que tradicionalmente suscitan las matemáticas y la habitual acusación de que no sirven de mucho en la vida cotidiana, el autor ofrece una explicación muy amena y rigurosa del mundo de los números, su historia y sus innumerables aplicaciones prácticas. Tal como testimonian los distintos autores que García del Cid cita en su obra, las matemáticas pueden considerarse un auténtico arte, y su importancia resulta fundamental, pues nos hablan de la naturaleza de nuestra propia mente