“La educación es la vacuna contra la violencia” es una frase de Edward James Olmos que te viene a la cabeza cuando terminas “La paradoja del bibliotecario ciego” de Ana Ballabriga y David Zaplana Martinez.. La nueva novela de los ganadores del premio Indie de Amazon en 2016 es una historia completamente diferente a “Ningún escocés verdadero”. En esta ocasión, nos presentan una novela negra con un marcado corte de denuncia social. La historia está protagonizada por dos familias: la de Camilo, un escritor de novela policiaca que quiere dar un giro a su carrera literaria, y la de su hermana Remedios; una mujer que intenta sobrellevar cómo puede el haber perdido su figura y juventud. Ambos hermanos tienen que lidiar con su madre; una mujer autoritaria que nunca tiene una palabra amable y que durante toda su vida ha intentado imponer su voluntad a todo aquel que se ha cruzado en su camino La vida familiar tiembla hasta los cimientos cuando Camilo encuentra una llave de seguridad en la culata de una pistola que perteneció a su padre. El hallazgo hará que salgan a la luz secretos familiares que han permanecido ocultos más de veinte años. Ésta es una de esas novelas que duele. ¡Y mucho! Entre sus páginas encontraréis violencia de género, acoso escolar, pederastia, maltrato animal y abuso sexual. Y todo ello en el seno de una misma familia porque en muchas más ocasiones de las que creemos, el enemigo duerme en casa. Los autores, a través de un análisis exhaustivo de cada uno de los personajes, nos muestran las dos caras de la moneda: la del verdugo y la de la víctima. Y lo fácil que es cambiar de rol cuando encuentras una víctima más débil sobre la que volcar tus frustraciones. Una novela trepidante en la que autores logran que temas pasar la página por miedo a lo que puedas encontrarte. Consiguen un terrible ambiente opresivo que sólo te permite un respiro a través de las reflexiones de Borges. El título del libro nos plantea el dilema al que muchos se enfrentan cada día. ¿Hay algo más terrible que un bibliotecario ciego rodeado de libros? Una metáfora sobre la ceguera de la sociedad a una lacra que cuesta cientos de vidas cada año. Por último, me gustaría agradecerles a los autores, que traten un tema que no parece importar demasiado a mucha gente: el maltrato animal. Por el dolor que sienten, porque no pueden defenderse y porque, como lleva años estudiando el FBI, de matar un animal a matar a un ser humano sólo hay un paso.
hace 6 años