Continuación de "En el país de la nube blanca". 703 páginas en el libro de mi edición, para una novela en la que se continúa con el espíritu de la primera parte. Es cierto que cuesta un poco al principio, ya que la transición hacia las nuevas protagonistas es larga, pero una vez presentada la trama, se vuelve una lectura ágil, en la que la fluidez se hace presente con el paso de la lectura, y se puede llegar a sufrir con lo que le ocurre a la nueva generación. Seguimos en Nueva Zelanda, ya en 1900, y se sigue entrelazando la novela ficiticia con puntadas continuas de lectura histórica, lo que hace que se vuelva mucho mas interesante.
hace 10 meses