Me ha resultado muy difícil leer porque no me ha enganchado nada. La trama lenta y falta de gancho que te atrape y te obligue a leer y leer. La he dejado a 100 páginas para terminar.

La verdad es que Michael Connelly nunca me decepciona con su inspector Harry Bosch. Es siempre una garantía de que no vas a poder de jar de leer la noevla por lo interesante que resulta.

Con este libro, Michael Conelly demuestra, una vez más, que después de veinte años de existencia de Harry Bosch, este sigue teniendo aún mucha vida, firmando una obra que está muy en la línea de lo que el autor ya tiene acostumbrados a sus seguidores. Por mencionar algo diferente, se detecta en este libro un toque más humano del personaje, no solo en la relación con su hija, sino también en la propia motivación de la investigación.

está bien pero otros libros del mismo autor me han gustado más.

Novela correcta, que mantiene mucho la intriga hasta la mitad de la misma. A partir de ahí, hay menos intriga, pero más acción, hasta llegar a un final ya previsible. Me ha gustado la forma de llevar la investigación de un asesinato sin resolver acontecido hace 20 años, y cómo el veterano detective Harry Bosch va tirando de un pequeño hilo para acabar desenredando la complicada maraña.