Resumen

La novela narra cómo a sus cincuenta años, el pianista canadiense Glenn Gould, afamado y ensalzado en todo el orbe, medita dar un nuevo rumbo a su vida. Ha llegado el momento, pues el consuelo que antes obtenía tocando, ahora no es sino un pálido recuerdo. Lleva demasiado tiempo luchando contra el progresivo deterioro de su cuerpo y negando las distintas pérdidas que ha ido sufriendo. Glenn se reconoce como el ermitaño más contumaz de todo Canadá. Como un conductor poco prudente, capaz de guiar el coche con una sola mano y los pies cruzados sobre los pedales. Como alguien capaz de consumir horas y horas frente al televisor. Adora a los animales, pero odia al público más bovino que abarrota sus conciertos. Idolatra el recuerdo de su madre y, por el contrario, defenestra todo lo que tiene que ver con su padre. Entre la primera grabación de las Variaciones Goldberg de Bach, de 1955, y la segunda, de 1981 -dos auténticos hitos-, se ha comportado como un niño mimado a veces, otras como un verdadero payaso. Sin embargo, su genio latirá vivo hasta el último momento. Y es que Glenn fue único e irrepetible. Premio Jaén de Novela 2015.