Este libro cuenta la historia de un grupo de venezolanos, con más corazón que estrategia, que se embarcaron (nunca mejor dicho) en el «Falke» con el propósito de venir de Europa, donde algunos de ellos estudiaban (y no seguían ninguna práctica militar, ni siquiera un poco de educación física al amanecer), a invadir Venezuela y derrocar la tiranía de Gómez. El resultado de esta aventura es conocido, está en la historia contemporánea de Venezuela; lo que la novela aporta es el desplazamiento físico y mental de aquellos hombres, sobre todo de los muchachos involucrados, a partir del momento en que deciden, en una operación quijotesca, convertirse ellos mismos en personajes de la literatura que les tiene la cabeza en ebullición y en redentores de la patria oprimida. El desastre está cantado desde el primer párrafo, pero es tal la vitalidad de los personajes, el precioso detalle con que sus psicologías quedan expuestas, que puede afirmarse que Vegas los ha amarrado a la vida por siempre.