Ángel Espinosa llega a la ciudad francesa de Brest para montar una exposición de pintura vanguardista española, pero ese viaje no sólo supone una vuelta al pasado sino que es a la vez un ajuste de cuentas consigo mismo. Quince años antes, cuando aún era estudiante, también llegó a esa misma ciudad acogido por unos familiares suyos exiliados desde la guerra civil. Sin embargo, el pasado de su padre, un guerrillero antifranquista de las sierras del sur de Granada, al que no conoció, le persigue y le va dando alcance hasta arrastrarlo en una espiral histórica que pide a gritos la búsqueda de la verdad que oficialmente se quiso silenciar y ocultar. Gracias a los recuerdos y testimonios de unos y de otros trata de recomponer un dramático rompecabezas cuyas últimas piezas no logró encajar entonces y que, ahora, tantos años después, se imponen a él como una evidencia.