El último abecedario de Gonzalo Jerez es un libro compuesto por veintisiete historias protagonizadas por veintisiete personas diferentes. ¿Cuál es el nexo de unión de todas ellas? Que todas terminan en un mismo lugar y con una misma frase: “Un silencio que casi se podía tocar lo invadió todo. Un silencio que sólo fue roto por un grito desgarrador, más parecido al rugido de una bestia. Estaba empezando a pasar”. Hay géneros literarios en los que parece que no es posible innovar. Todo está visto o leído. Hasta que llega el Señor Jerez y plantea un punto de vista totalmente nuevo. ¿Cuál? Tendrás que leer de la A a la Z, literalmente hablando, para descubrirlo. Cuando empiezas a leer, te sumerges en una vorágine en la que puedes encontrarte todo tipo de personajes: gente con problemas matrimoniales, gente sin hogar, ludópatas, fans algo psicóticos… No encontraréis dos historias iguales. Y estamos hablando de veintisiete por aquello de que la RAE decidió borrar la “CH” del abecedario. Sin duda ese es el punto fuerte de la novela: hacer converger en un mismo momento y lugar las vidas de personas muy diferentes entre sí. Cada uno de ellos nos ha contado una parte de su vida pero todas tendrán el mismo final. ¿O no? Suelen decirnos que nada es imposible. Gonzalo sabe que es totalmente cierto.