En el caso número 33 de la serie Brunetti, Donna Leon aborda la preocupante cuestión de la violencia en las bandas juveniles. ¿Cómo puede ocurrir algo así en pleno corazón de Venecia, y, lo que es peor, llegar incluso al interior de la questura? Brunetti y Griffoni harán todo lo que esté a su alcance para comprender este fenómeno.
La Piazza San Marco aparece cubierta de cristales: dos bandas juveniles se han enfrentado violentamente en la oscuridad. Mientras la commissario Griffoni confía en su intuición para descubrir cómo un adolescente al que ha conocido recientemente puede acabar atrapado en un grupo así, Brunetti recurre a sus contactos al tiempo que intenta desentrañar el oscuro pasado del padre del joven. Tampoco el vicequestore Patta está tranquilo: hará lo que sea necesario para protegerse a sí mismo y a su entorno de esta alarmante amenaza, una situación que se está tornando especialmente desagradable en una ciudad tan turística como Venecia.