El que narra la historia de su vida es Pablos, con s, y lo hace desde su niñez hasta que piensa embarcarse para las indias, a América, ya que aquí, desde Madrid, Segovia, Toledo, Sevilla y media España, lo tienen reconocido unas veces como estudiante de la Universidad de Alcalá, como caballero rico, otras como jugador, otras como monje, y todos como el mayor pillo y tramposo y buscado para encarcelarlo de nuevo. Habla de sus padres, ambos de muy mala ralea, y de los trapicheos propios. Es una joya literaria del género picaresco.
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