Curiosamente, “El ángel sin alas” de Fernando Moreno Espinosa y yo nos encontramos tras una visita a la estación de metro de Chamberí que ilustra la portada. Un lugar muy especial que te transporta a otro tiempo. La estación de Chamberí, conocida como la estación fantasma, se cerró en 1966. Tres años más tarde, Gabriel, buscando respuestas a ciertos fenómenos paranormales que siempre le habían fascinado, desapareció en su interior sin dejar rastro. Veinte años después es su hijo Rubén quien desaparece en el mismo lugar. En la actualidad, Carlos, hijo de Rubén, vive en Sevilla. Se ha mudado allí para olvidar el dolor de una adolescencia solitaria y la pregunta que le ha atormentado durante años: ¿qué pasó con su abuelo y con su padre? No es sencillo definir el género literario de la novela. En ella encontraréis campos electromagnéticos que permiten viajar en el tiempo, amor, traición, espías, cameos, quintacolumnistas... Alternando los tiempos como una gran mago, el autor nos lleva de Madrid, a Guadalajara y de los días previos de la Guerra Civil a la actualidad. “El ángel sin alas” es una novela en la que el amor es un arma poderosa capaz de generar felicidad, odio, dolor e incluso cambiar el destino de los protagonistas. Y no me refiero únicamente al amor romántico, que lo hay, sino también al de un padre por su hijo, el que se siente por unos ideales que crees que harán del mundo un lugar mejor, el de amigos que siempre ayudan sin preguntar… Una historia llena de magia en la que cada protagonista se ve enfrentado a dos posibles futuros: el que dejaron atrás o a uno nuevo e incierto que dependerá del devenir de la Guerra Civil y de energías que escapan de su control. Un libro con el que he sufrido, con el que me he emocionado, con el que he viajado a otros tiempos y lugares y que he terminado con la sensación de que Gabriel, Rubén, Carlos y Gloria siempre serán parte de mi vida. Por lo mucho que he aprendido de ellos y porque yo también creo que cada uno se forja su destino aunque a veces, necesitemos cierta ayuda…
hace 7 años