Este conjunto de poemas puede parecer inconexo o inconsistente. Y en buena medida lo es: no hay unidad temática ni un esquema fijo predeterminado. Ni siquiera una voz única, dado que reúnen casi una década de trabajo en esto de escribir versos. Disparejo: visceral a ratos, prolijo y apegado a lo formal en otros momentos. Poesía que reniega de apellidos, de los “ismos” y de las taxonomías mañosas. Poesía a secas, con las manos vacías y sin cruzar los dedos.