El escritor y crítico teatral Marcos Ordóñez relata la aventura humana y profesional de Ava Gardner y desvela lo que nunca se había contado acerca de sus días -y, sobre todo, de sus noches- en nuestro país, donde vivió desde 1954 hasta finales de los años sesenta. Por este libro desfilan los amores de la bella y enigmática diva, sus pasiones más duraderas (los toros, el flamenco, el alcohol y el trasnoche), sus miedos y anhelos, y una vasta nómina de invitados de postín que incluye, entre otros, a Hemingway, Welles, Samuel Bronston y Nicholas Ray.