Me he quedado fría con este libro. Pero fría positivamente. Y con ganas de cambiarle tanto el título como la portada, porque no te dan, ni de cerca, una descripción de lo que hay dentro. Puedo prometer, y prometo, que cuando empecé a leer este libro jamás hubiera imaginado que iba a ser así. Llevaba guardado en mi librería puede que unos cuatro años sino más porque la verdad es que me parecía la típica historia de hermanastros. Pero vi que una compi de instagram lo reseñaba y le gustó y dije, bueno, como lo tengo guardado y acabo de leer Culpables, lo voy a sacar, que será algo parecido... ¡Ni de lejos! (También en culpables pasaba un añito y en el final, varios, pero que no, que no es ni parecido). Es verdad que, al principio, el lenguaje me parecía muy infantil y me dije, como sea así todo el libro, soy capaz de dejarlo. Pero la segunda parte llegó y, con ella, un "7 años después". Una muerte, vidas totalmente diferentes, un reencuentro, situaciones que podían haber ido por caminos muy diferentes, elecciones, atracción, pasión... Penelope Ward ha sido todo un descubrimiento. Que le vayan traduciendo más libros, que aquí tiene una lectora. Nota 8/10. Raquel Attard. @missattard