Segunda obra que leo de este autor italiano. Al igual que la anterior me ha encantado. Relato corto, ágil y agradable de leer y, además, tiene algo de thriller. Hay quien dijo: si lo bueno además es breve es doblemente bueno.
hace 3 añosUna mujer que huye del pasado. Un niño que huye de la realidad. Y un hombre atrapado por un lejano pecado. Tres historias, tres personajes, las infinitas posibilidades de la redención del alma humana. Durante meses, los lunes y jueves, Roberto Marías atraviesa a pie el centro de Roma para ir a la consulta del psiquiatra. Se sienta frente a él y, a veces, surgen los recuerdos. Vuelve a la época en que él y su padre se enfrentaban a las olas del mar sobre una tabla de surf, antes de sus años como agente encubierto, cuando conoció el cinismo, la corrupción y el espanto. Cuando se convirtió en un profesional fantasma, entrenado para engañar, desaparecer sin dejar rastro y hacer trampas con los demás, pero también consigo mismo. Cuando Giacomo, un niño de once años, abrumado por las pesadillas, le pide ayuda, Roberto descubrirá que existe siempre la posibilidad de volver a empezar.
Segunda obra que leo de este autor italiano. Al igual que la anterior me ha encantado. Relato corto, ágil y agradable de leer y, además, tiene algo de thriller. Hay quien dijo: si lo bueno además es breve es doblemente bueno.
hace 3 años