Una gran novela, por cierto, aunque la traducción al español deja mucho que desear. La vida del padre Francisco, sacerdote católico, nos brinda una gran enseñanza de amor, entrega y humildad. Qué distinta sería la historia de la humanidad si aceptáramos y toleráramos la existencia de otras religiones y otras creencias como válidas, todo dentro del respeto hacia el otro. El final de la novela es muy emotivo pues refleja la figura del verdadero misionero. Otra gran obra de A. J. Cronin.
hace 5 años