Dos extraordinarias novelas conforman el legado de John Kennedy Toole. Junto a su obra maestra, 'La conjura de los necios', tenemos esta joya menos conocida que escribió con tan solo 15 años y que se titula 'La biblia de neón'. 'La biblia de neón' cuenta la historia de David, un chico que crece en la Mississippi rural, en una casa de la colina junto a su madre y su tía. Estamos en la época de la guerra y posguerra de la II Guerra mundial. 'La conjura de los necios' y 'La biblia de neón' tienen en común ese trasfondo trágico. Si bien en 'La conjura de los necios' está muy bien disfrazado de humor –y, de hecho, te ríes a carcajadas–, esta historia es más dramática, más desgarradora, y tiene una profunda crítica a ese fanatismo religioso y al racismo de una sociedad tan devota y retrógrada. Pero, en el fondo, ambas son historias en las que sus personajes tienen vidas tristes, solitarias, vidas asfixiantes. Tanto Ignatius Reilly (protagonista de La conjura de los necios) como David (protagonista de La biblia de neón) son dos personajes muy grandes que viven en mundos demasiado pequeños, claustrofóbicos, no vislumbran más horizonte que las paredes de su casa y un pueblo pequeño y lleno de imbéciles, donde te despachan si no piensas y actúas como ellos. Y ambas tienen un final que te deja sin aliento. J.K. Toole era un genio. Ningún otro autor ha logrado conmoverme tanto.
hace 2 años