Ian McEwan es un escritor que siempre me sorprende por su inteligencia y su amplia cultura, que se refleja en sus descripciones detalladas y minuciosas (a veces demasiado) tan características de su narrativa. En "Sábado", lo mismo describe con autoridad una operación de cirugía craneal (para lo que estuvo dos años documentándose con un neurocirujano) que la elaboración de un apetitoso guiso de pescado, o una vertiginosa partida se squash, en la que transmite perfectamente la rivalidad, el esfuerzo e incluso las sensaciones físicas del protagonista, un eminente neurocirujano, que comienza lo que va a ser una apacible y familiar jornada de sábado con la extraña visión de un avión en llamas sobrevolando Londres y a lo largo del día, una concatenación de acontecimientos hace que su sábado sea todo menos apacible.
McEwan es un excelente escritor, que en esta novela, a lo largo de un atípico día en la vida del protagonista, reflexiona sobre, familia, vejez, miedo, guerra, amor, trabajo, violencia, música, esfuerzo, rivalidad, poesía…
Me ha gustado mucho.
hace 10 años
5
0