MUÑECAS TRAS EL CRISTAL PAZ, PEDRO DE

Nota media 8 Muy bueno 1 voto 1 críticas

Resumen

Jaime Areta es un joven treintañero de existencia anodina e introspectiva que se dedica profesionalmente a la informática. Para él no existe más que su ámbito laboral y su particular mundo interior en el que desarrolla una peculiar afición. Es lo que suele denominarse un «Pic Hunter»: una persona que se dedica a navegar por Internet en busca de fotos pornográficas con el fin de almacenarlas, coleccionarlas y clasificarlas. En una de sus múltiples cacerías termina visitando una página de contenido erótico donde encuentra la foto de Noelia Ballesteros, una mujer a la que conoció siete años atrás, de la que estuvo profundamente enamorado y con la que, por una serie de circunstancias, acabó perdiendo todo contacto. Impactado por su reciente descubrimiento y aguijoneado aún por el recuerdo de Noelia, decide investigar el actual paradero de su antiguo amor y las causas que la han llevado a formar parte del extraño y sórdido mundo de la pornografía descubriendo mucho más de lo que hubiera deseado llegar a conocer.

1 críticas de los lectores

8

Muñecas tras el cristal de Pedro Paz está protagonizada por Jaime Areta, un joven treintañero que trabaja como informático y lleva una vida solitaria y anodina. Su única afición es coleccionar fotografías pornográficas que clasifica y archiva en su ordenador. En una de sus búsquedas por Internet se encuentra la foto de Noelia Ballesteros, una mujer a la que conoció años atrás y de la que estuvo profundamente enamorado. Impactado por el descubrimiento decide investigar el actual paradero de su antiguo amor y descubrir por qué ha terminado trabajando en el mundo de la pornografía. El autor consigue mantenerte en tensión durante todo el libro desgranando paso a paso como Jaime termina involucrado en una investigación que escapa a su control porque llega a límites que ni hubiera sospechado. Es una carrera contrarreloj en la que no sólo la vida de Noelia está en juego. El libro también invita a reflexionar sobre esas decisiones que a veces no tomamos por miedo o vergüenza y que nos pesan toda la vida. A veces, sólo a veces, hay que ser valiente y arriesgarse porque el no hacerlos puede pesarnos toda una vida.

hace 8 años