Una tos persigue a un hombre desde la infancia. Es una tos que flota tras él, controlando sus pasos. Para él la vida es llevar esa tos detrás y obedecerla. Siempre perseguido, siempre acompañado.
Nos narra su historia la persona que ha convivido con ese hombre y con esa tos sin poder oírla jamás, alguien que con portentosa memoria nos desvela un discurrir de paseos, meriendas y recados.
La tos es una fábula doméstica que nos introduce en la vida de dos personas que parecen habitar fuera de este tiempo, con sus reglas, sus palabras, sus silencios, mostrándonos una existencia simple y aterradora.