En el primer libro de la Biblia la Historia de José y sus hermanos se caracteriza por una extensión superior a cualquier otra narración presente en Génesis, de la creación a las vicisitudes de Jacob-Israel. Patriarca y Epónimo de una tribu jamás habida. José es una figura estudiada con frecuencia como anticipador de Jesús, o bien en relación al futuro nacional de Israel o, incluso, sobre la base de presuntos lazos con su casa reivindicados por el cisma samaritano. La misma riqueza del texto no excluye otras posibilidades interpretativas. En este volumen - que presenta el texto de la LXX junto a una nueva traducción que pone de relieve en sus notas las diferencias con el texto hebreo, para cerrarse con la versión latina de la Vulgata - se toma en consideración la figura de José a la luz de los problemas y exigencias sentidas por la comunidad judía de Alejandría de Egipto en el periodo histórico en el que lucha por los derechos civiles con los egipcios y en el que se elabora la traducción griega del Pentateuco (s. III a.c): en tal perspectiva, puesta aún en mayor evidencia por las soluciones adoptadas por los traductores en griego. José adquiere el papel de héroe cultural no hostil al mundo egipcio, contraponiéndose a la otra gran figura hebrea en ámbito egipcio, es decir Moisés.