Me ha gustado bastante. Especialmente el modo de enfrentarse con tesón, inteligencia y valentía de los protagonistas a las injusticias raciales, sin caer en el lloriqueo lastimoso y el victimismo que se estila en la actualidad. Aunque puede que sean un poco demasiado templados.
Por otro lado, lo que me acercó al libro es el género de terror, y en ésto le falta más de una y dos vueltas de tuerca. La atmósfera de angustia, opresión y misterio que buscaba adolece por su ausencia. Además, en el género de terror siempre se paga un precio, incluso los supervivientes. En el caso de Lovecraft por ejemplo, ya que aparece en el título de este libro, los protagonistas suelen perder la cordura. Aquí sin embargo, aparte de algunas magulladuras en algunos episodios, los negros acaban en una mejor posición que al principio y el final del libro sólo puede calificarse de feliz.
En definitiva creo que el libro se puede calificar mas de fantástico que de terrorífico.