Otoño de 1940: ha estallado la Segunda Guerra Mundial. Llueven bombas sobre Londres; los teatros han cerrado, y de noche reina la oscuridad por miedo a la aviación enemiga. Una joven rubia y pálida, que parece salida de un lienzo de Renoir, acaba de aceptar la oferta laboral de Horizon, una revista que se erigirá en referente cultural europeo. Entre otros destacados escritores, allí conocerá a su primer marido, George Orwell. Vivaz, atractiva, amiga de los intelectuales, pensadores y artistas más relevantes de su tiempo, Sonia Orwell (1918-1980) vivió en un mundo donde a la mujer sólo se le concedía un papel accesorio. Escindida entre su vulnerabilidad íntima y su coraje externo, el indomable tesón con que administró el legado literario de Orwell le valió pasar a la historia envuelta en rasgos negativos. En Sonia Orwell, Hilary Spurling ahonda en el claroscuro vital de una mujer radiante y perfeccionista, enérgica y decidida, que una vez escribió: "Para mí, la inteligencia es una forma como otra cualquiera de obsesión."