Observar cómo se despeña una película que ha sido absurdamente sobrepromocionada puede ser más divertido que observar los pasajes más emocionantes de la cinta en sí. Durante más de un siglo, los cineastas han elaborado productos destinados a procurar entretenimiento e información a sus espectadores. Entre estos millares de títulos se cuenta un buen número de fracasos económicos o artísticos. Con ¡Qué ruina de película, los enamorados del séptimo arte podrán saborear cada equivocada decisión de guión, cada error de casting, cada uno de los inconcebibles extravíos presupuestarios que marcaron los mejores tropiezos de la historia del Hollywood.