Una pequeña joya que nace de la prolongada amistad literaria entre Robbe-Grillet y Roland Barthes. Entre las innumerables muestras de la profunda y mutua estima intelectual encontramos su correspondencia privada o textos publicados con las conversaciones que mantuvieron. Estos textos de Robbe-Grillet son como el eco diferido de los que Roland Barthes le dedicó en 1964 en sus Ensayos críticos.